La difícil situación económica continúa llegando a distintos pueblos de la Union Americana, hasta el punto de que ciudades como Newark, Passaic y Paterson en Nueva Jersey, tuvieron que reducir su fuerza policial y de bomberos para poder mantener funcionando esos departamentos.
En un pueblo de Carolina del Norte, el jefe de la policía Michael Scott preguntó anoche en la reunión del Concilio, que le permitieran usar $30,000 destinados a material de oficina para poder comprar gasolina para los carros de las patrullas. De no recibir el dinero, Smith dijo que la policía puede dejar de responder a algunas llamadas al 911 y detendrán investigaciones porque cancelarán policías.
Smithfield no es la única ciudad en busca de formas de reducir costos para lidiar con los problemas presupuestarios. El alto desempleo y un mercado de la vivienda han empujado a luchar más de la mitad de ciudades de EE.UU. para reducir personal, aumentar las tasas o cancelar proyectos de infraestructura, de acuerdo con la Liga Nacional de Ciudades. La situación se ha vuelto tan grave que en el fondo los recortes presupuestarios estatales y locales puede ser la desaceleración del crecimiento económico de EE.UU., según The Associated Press.
Funcionarios de la ciudad en Allen Park, Michigan, un suburbio de Detroit, anunció el martes que despedirá a más de 30 oficiales de policía, bomberos y trabajadores de la ciudad, los informes de Detroit Free Press. En Santa Ana, California, un análisis del presupuesto encontró que la ciudad puede ser necesario tomar medidas como el cierre de algunas estaciones de bomberos en la noche para cerrar una proyección de $ 30.000.000 déficit presupuestario
El Condado de Camden, Georgia, flotaba la contratación de los presos como bomberos el mes pasado para reducir costos. (foto: Neciotv.com)
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