La mayor parte de la población dominicana que no esta comprometida con ninguno de los partidos mayoritarios PRD y PLD coinciden en que las altas instancias de estos partidos lo ven como el instrumento que le genera riqueza cada determinado tiempo, entiéndase un negocio lucrativo.
Esta claro, el objetivo de los politiqueros dominicanos es hablar mentira para confundir cada cuatro años a quienes fielmente le siguen, desconociendo que están siendo usados como conejillos de india.
Un ejemplo claro, en la convención del partido blanco, con la inversión que hicieron Hipólito Mejía y Miguel Vargas se construyen dos o tres presas, con las cuales se irrigarían miles de tareas de tierra. Sin embargo, como esto es un negocio, usted se ha puesto a pensar, si Mejía gana las elecciones nacionales en el 2012, me imagino que lo primero que haría es recuperar su inversión, porque a su alrededor hay amigos que le apoyaron económicamente, y a estos amigos hay que devolverle lo invertido con intereses, o darle un cargo en la administración para que roben y recuperen lo suyo.
Así se mueven las cosas en el PRD.
Mientras tanto en el PLD, un partido que tradicionalmente elige su candidato de un grupo de tres aspirantes, ahora han aparecido un montón, entre ellos: José Tomás Pérez, Franklyn Almeida, Rafael Alburquerque, Francisco Dominguez Brito y Danilo Medina, de los cuales este último es quien luce el favorito y esto lo saben los demás.
Qué buscan Pérez, Almeyda, Alburquerque y Brito, confundir a sus propios compañeros y al mismo tiempo crean pequeños grupos y se apandillan dentro de su organización, consciente de que no le ganan a nadie. El objetivo real de estos negociantes es que cuando Danilo Medina sea elegido candidato oficial del PLD, se vea en la necesidad de sentarse con ellos a negociar, claro, a negociar las dependencias del estado en caso de que gane las elecciones nacionales a su opositor PRD.
Para nadie es un secreto, el PLD desacreditado por sus desaciertos en el poder tiene un solo salvador y hasta donde entiendo es una persona que ha demostrado ser un hombre con una paciencia envidiable, un hombre cristiano, que ha sabido responder con silencio las ofensas de sus propios compañeros de partido enquistados en las altas esferas del gobierno leonelista.
Pero dentro de los ambiciosos peledeistas no escapan los promotores de la reelección: Freddy Pérez y Félix Bautista, quienes están conscientes que existe una prohibición constitucional que impide a Fernández repostularse y que éste habría dejado entrever que no se presentaría, pese a la posición del mandatario, sus adulones han seguido en su campaña de que se “sacrifique” otra vez.
Ni siquiera los estratos económicos más acomodados, los que concentran el capital financiero, las haciendas, las pocas empresas industriales que aún funcionan y la formación académica está conforme con lo que hoy sucede en República Dominicana: un sistema social clientelista que sólo permite el enriquecimiento acelerado de un puñado de individuos favorecidos por las relaciones familiares y políticas.
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