NUEVA YORK.-
El reconocido activista comunitario y político Nelson Peña, quien dirigió el
Desfile Nacional Dominicano en Nueva York por más de 20 años, quedó fuera de la
dirección del multitudinario evento, que se celebra en agosto de cada año en la
Sexta Avenida en Manhattan. Peña, no ha devuelto numerosas llamadas para
confirmar o negar el acuerdo con la fiscalía.
Según una fuente
cercana al desfile, Peña se vio obligado a firmar un acuerdo con la
Procuraduría General del Estado, en el que acepta mantenerse alejado al menos
por tres años de la actividad, en tanto, se integrará un comité que dirigirá el
montaje y realización de la parada que atrae a millares de dominicanos.
La fuente
dijo que Peña, venía siendo investigado por la oficina del fiscal estatal Eric
Schneiderman, por alegada evasión de impuestos y un manejo “dudoso” de los
fondos del desfile.
“Hay una
investigación en curso y no podemos decir nada sobre cualquier acuerdo o no que
se haya hecho en relación al desfile dominicano”, dijo la tarde de este lunes 9
de marzo un portavoz de la fiscalía a este reportero.
Se dijo que
el fiscal estatal ha contactado a líderes políticos y activistas comunitarios,
principalmente del Alto Manhattan, para que sometan nombres y ternas de
eventuales candidatos a integrar el comité del desfile.
El año
pasado, el alcalde Bill de Blasio, se abstuvo de participar en el desfile,
porque habría recibido supuestamente la información de que Peña iba a ser
arrestado ese mismo día, 10 de agosto del 2014.
Peña, se ha
quejado de una “conspiración” en su contra para despojarlo de la dirección del
desfile, pero se confirmó que en uno de los interrogatorios de la fiscalía, se
le exigieron al menos tres años de reportes de impuestos de los millares de
dólares recaudados por el desfile, por ventas de carrozas, publicidad y
participación de delegaciones.
Se explicó que Peña fue forzado al acuerdo, debido a que
sometió la petición para el montaje del desfile del 2015 en el Departamento de
Policía (NYPD) que ya tenía un alerta de la fiscalía en la que se advierte que
el activista ya no tiene nada que ver con la organización y celebración de la
parada.
El desfile,
no tenía una oficina propia desde hacía varios años y Peña rentaba un
escritorio en una agencia de la calle 152 y avenida Broadway, desde donde
manejaba la coordinación y despachaba las transacciones económicas del desfile.
En diciembre
del 2012, el local que servía de operaciones al desfile, situado en la avenida
Amsterdam, entre calles 168 y 167 en el Alto Manhattan, fue desalojado por las
autoridades, por alegada falta de pago de la renta.
Allí, también
funcionaba la Federación Pro Voto Dominicano en el Exterior, fundada y también
dirigida en los años noventas por Peña.
Posteriormente, el empresario Rafael Álvarez, acusó a
Peña de una gran estafa y el entonces presidente del desfile, respondió
defendiendo la integridad del evento durante una conferencia de prensa.
El activista,
advirtió que demandaría a Álvarez y otros difamadores del desfile, pero al
parecer, el escarceo entre ambos, se quedó ahí, aunque se aseguró que Álvarez
había sometido a Peña en la corte.
El
expresidente del desfile, era investigado era desde hacía algunos años y una
versión no confirmada sostiene que su actual abogado Manuel Andrés Aranda,
logró un acuerdo con el fiscal estatal, para que Peña no sea acusado de ningún
cargo ni se le exija la devolución de los impuestos.
El jurista dominicano no ha devuelto llamadas de este
reportero para confirmar o aclarar la situación de Peña.
Pero el
domingo en la noche, un oficial electo dominicano confirmó que se dan pasos
concretos para integrar un comité que dirigirá el desfile a partir de este año,
aunque señaló que desconoce el método que se usará en la escogencia de los
nuevos dirigentes.
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